Es una condición común donde uno o ambos lados de la uña, generalmente en los dedos de los pies (especialmente el gordo), crecen hacia adentro y penetran en la piel circundante. Esto causa inflamación, dolor, enrojecimiento y, en casos más graves, infección.
¿Por qué se producen?
Las uñas incarnadas pueden tener varias causas:
- Corte incorrecto de las uñas: Cortarlas demasiado cortas o redondear los bordes puede favorecer que la uña crezca hacia adentro.
- Calzado inadecuado: Zapatos apretados o con punta estrecha ejercen presión sobre los dedos y pueden provocar que la uña se encarne.
- Traumatismos: Golpes o lesiones en los dedos pueden dañar la uña y provocar que se curve.
- Infecciones fúngicas: Las infecciones por hongos pueden alterar la forma de la uña y predisponer a las encarnaciones.
- Deformaciones en los dedos: Algunas personas tienen una predisposición genética a tener uñas curvadas o dedos de los pies deformados, lo que aumenta el riesgo.
¿Cuáles son los síntomas?
- Dolor en el dedo afectado.
- Enrojecimiento e inflamación alrededor de la uña.
- Sensibilidad al tacto.
- Pus en casos de infección.
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